Fundamentos básicos del magnetismo.
El magnetismo es la parte de la física que estudia los
fenómenos relativos a los imanes y al campo magnético
creado por estos, así como el comportamiento de los
diferentes materiales sometidos a la acción de dicho
campo.
Un imán consta de tres partes:
- Polos: Son los dos extremos del imán en los
cuales las fuerzas de atracción son más intensas.
Estos polos son el polo norte (N) y el polo sur
(S), también denominados polo positivo y
negativo respectivamente. Polos del mismo tipo
(combinaciones N-N y S-S) se repelen y los polos
de distinto tipo (combinaciones N-S y S-N) se
atraen.
- Eje magnético: Línea imaginaria que une los dos
polos del imán.
- Línea neutral: Línea imaginaria que separa las
dos zonas polarizadas.
Las corrientes eléctricas y, en general, las cargas en
movimiento, se comportan como imanes o, lo que es
lo mismo, producen campos magnéticos.
Los polos magnéticos siempre se presentan
por parejas. Si se rompe un imán por la mitad, vuelven a
aparecer los polos N y S en cada una de las mitades.
La
mayoría de los metales (hierro, acero…) son atraídos por
los imanes; sin embargo, en algunos, como el oro o la
plata, no tiene lugar este suceso.
Se considera por convenio que las líneas de campo
salen del polo magnético norte y entran en el polo
magnético sur, pero carecen de principio y fin, ya que
no existen polos magnéticos aislados y, por lo tanto,
las líneas continúan por el interior.
El polo
sur magnético de la Tierra se encuentra a 1800 kilómetros del polo
norte geográfico; esta diferencia, medida en grados, se
denomina declinación magnética (Tipler, 2008).